El día que Bryce y Velasco salvaron de morir a Julio Ramón Ribeyro

¡Qué tal, lector de Mar de fondo! Hoy me voy a permitir contar una historia que me llamó mucho la atención y que leí en el libro "Ribeyro, una vida", de Jorge Coaguila. Se trata de la vez en que Alfredo Bryce Echenique y Juan Velasco Alvarado (sí, el expresidente peruano) le dieron, a su modo, una mano a nuestro querido cuentista, quien vivía episodios de salud muy difíciles en París. 

Julio Ramón Ribyero enfermo
Imagen: https://pin.it/1HQGYkV 

Ya sabes que mi pasión por Ribeyro me ha hecho acercarme cada vez más no solo a su obra, sino también a los momentos más significativos de su vida. Por eso, cuando decidí comprar el libro de Coaguila era para mí como tener una ventana abierta a mi autor favorito. 

La enfermedad de Julio Ramón Ribeyro

Sucedió que Julio Ramón Ribeyro se moría en un hospital en París, todo a causa del cáncer que ya comenzaba a hacer estragos en su cuerpo. En una entrevista a Coaguila, Bryce le contó cómo ayudó para que el gobierno de Velasco prestase una cantidad fuerte de dinero para el tratamiento de Ribeyro. 

El 'flaco' se encontraba muy grave, conectado a sondas, prácticamente dañado. Había perdido muchos kilos (sumados a los que ya le faltaban). "La situación era tan denigrante que pidió que yo no entre", dijo Bryce 'Que no entre Alfredo, que no entre Alfredo, no quiero que me vea así'". 


TE RECOMIENDO: Leer "Herodías", cuento de Gustave Flaubert


Bryce menciona que estaba lleno de apartados por el cuerpos y que entraban desde la nariz, en las orejas en la boca "Un asco de hombre". Sentado en una silla porque no podía ni siquiera recostarse. Allí es donde, según el autor de "Un mundo para Julius", Ribeyro grabaría un cassette para su familia diciendo: "No muero solo, muero con un hermano que se llama Alfredo Bryce". 

La solución de Bryce

En otra parte de la anécdota narrada por Bryce, este refirió que tras salir de sala de operaciones Ribeyro quedo destrozado. Ya no se encontraba trabajando en France-Presse y era ya delegado alterno y ministro consejero cultura en la Delegación Permanente del Perú ante la Unesco, mientras en nuestro país gobernaba Juan Velasco Alvarado. 

Esa primera operación no estaba pagada y necesitaba operarse otra vez. Corría el año 1973. Se hizo lo posible, no faltaron las colectas, pero todo era poco ¿Qué hacer? La salud de Ribeyro, debilitada y cada vez más calamitosa le hacía guiños a la muerte y había que salvarlo a como dé lugar, pues había recaído y tenía deudas. 

"Alida, su esposa, me llamó desesperada. Necesitaban 15 dólares, para pagar la deuda e internar a Julio. Se requería, pues , imaginación para conseguirlos: mientras tanto, él se desgarraba de dolor. Así es que cogí un lapicero y redacté una carta dirigida a Velasco. 

La carta de Bryce

'Los intelectuales peruanos reunidos en París -estaba yo solo, en realidad-- le pedimos que envíe, por favor, 15 mil dólares para la operación del escritor Julio Ramón Ribeyro, su agregado cultural ante la Unesco..'. Falsifiqué un sinnúmero de firmas: [Emilio] Rodríguez Larraín, [Gerardo] Chávez, [Alberto] Guzmán, Jorge Eduardo] Eielson, [Leopoldo] Chariarse"... 


DESCARGA GRATIS: Libro "Prosas Apátridas" de Julio Ramón Ribeyro


La respuesta de Velasco

Entonces, Bryce se las ingenió para entregar la carta directamente a la esposa del presidente, quien precisamente por esos días se encontraba en París. "Me valí de Roberto, un portugués que hacía las veces de chofer en la embajada peruana. Gracias a esto, en menos de 15 días, el dinero fue remitido por la señora Consuelo Gonzales de Velasco".

Con ese dinero se pudo cubrir los gastos y continuar con la recuperación de Ribeyro quien viviría 21 años más, hasta 1994 y puede que, tal vez sin el ingenio de Bryce y la ayuda de Velasco estuviésemos hablando de la muerte del cuentista aquel año. 

El cuento Solo para fumadores

Estos eventos marcaron la vida de Julio Ramón Ribeyro y se volvieron incluso parte de su obra. Si quieres saber cómo se sentía y cómo lo vivió desde su perspectiva; te recomiendo leer el cuento "Solo para fumadores", donde el mismo Ribeyro cuenta detalles de la temporada que pasó en el hospital. 

TE RECOMIENDO LEER: Así fueron los últimos días de Julio Ramón Ribeyro.

Mar de fondo

𝑆𝑜𝑦 𝐵𝑟𝑦𝑎𝑛 𝑉𝑖𝑙𝑙𝑎𝑐𝑟𝑒𝑧 (Lima, 1990) creador del Blog de Mar de fondo. Estudié Comunicaciones, Sociología y estoy escribiendo un libro. Soy un amante de los cuentos, cartas, diarios y novelas. Convencido de que "𝑈𝑛 𝑑𝑖́𝑎 𝑙𝑒𝑖́𝑑𝑜 𝑛𝑜 𝑒𝑠 𝑢𝑛 𝑑𝑖́𝑎 𝑝𝑒𝑟𝑑𝑖𝑑𝑜"

2 Comentarios

  1. Tenemos en común el amor y admiración por Ribeyro. Vivo en República Dominicana y tengo lo que he denominado la trilogía de la J: Ribeyro, Rulfo y Onetti

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El 'flaco' une masas. Te agradezco por visitar mi Blog y te mando un saludo hasta ese gran país. Abrazos

      Eliminar
Artículo Anterior Artículo Siguiente