¡Buenos días, lectores! Llegamos a fin de año y es un buen momento para revisar las lecturas que hemos leído o las que quisiéramos leer en los próximos meses. Por eso, hoy quiero compartir contigo algunos fragmentos de un libro que puede gustarte por su alto contenido biográfico. Se trata de las Cartas de Gustave Flaubert a Louise Colet ¡Vemos de qué se trata!
Imagen tomada de Pinterest: https://pin.it/2goAIeL |
Leer a Gustave Flaubert
Flaubert es uno de los autores que mejores recuerdos me ha dejado. Madame Bovary ha sido para mi una experiencia grata y conmovedora. Pero más allá de las obras importantes de este autor francés nacido en 1821, se encuentra su registro epistolar; es decir, la correspondencia que hoy se puede conocer tras la publicación 'El hilo del collar' (2021) una gran colección de estas cartas inéditas.
Tal vez cuando leas este post ya hayan pasado algunos unos días, pero lo escribo hoy 12 de diciembre recordando un año más del nacimiento del talentoso escritor, cuya pasión por el detalle y la perfección también la describo en este artículo.
Se considera a Flaubert el padre de la novela moderna, como la conoces hoy, y su prestigio se debió precisamente a esa revolución narrativa que tratarían de emular otros genios como Marcel Proust, James Joyce y Virginia Woolf.
La época de Flaubert es un siglo XIX post revolución con una sociedad convulsa y cambiante, con el desarrollo de la tecnología y el inicio del capitalismo. El escritor de Madame Bovary se resiste a esos cambios y se aleja para escribir y tratar de pensar su propia contribución al mundo y darle uno nuevo estilo de narrativa.
Las cartas de Gustave Flaubert que hablan sobre su vida y Madame Bovary.
$ads={2}
No hay mejor registro sobre la formación del escritor que sus propias cartas. Por eso, Alianza Editorial publicó en 2021 un volumen de 350 cartas, muchas de ellas inéditas bajo el nombre: 'El hilo del collar. Correspondencia'. La selección es valiosa y estuvo a cargo del catedrático de Literatura Francesa de la Universidad de Laguna, Antonio Álvares de la Rosa.
¿Qué encontraré en el libro sobre Flaubert?
En estas cartas está Flaubert en toda su expresión, sus metas, sus amores, reflexiones literarias y su polémica visión del mundo y sus congéneres; en fin, de la vida misma.
En este libro encontramos nueve etapas que van descubriendo la vida del escritor. Dos de ellas se hacen bastante relevantes. La primera, aquellas que envió a su amante Louise Colet y la segunda a su amiga George Sand.
Pero de todas estas cartas, las que envía a Louise son las más interesantes. Si nos remontamos a la historia su primer encuentro fue en París, en julio de 1846, en el taller del escultor Pradier. Desde entonces el escritor quedó prendado de la belleza de aquella joven. "Qué irresistible inclinación me ha empujado hacia ti? Por un instante vi la sima, comprendí el abismo y, luego me arrastró el vértigo. ¡Cómo no amarte a ti, tan dulce, tan buena, tan superior, tan amante, tan hermosa!", diría.
En 1853 le envía muchas cartas donde podemos conocer el hartazgo de Flaubert con el mundo. "No queda otra cosa que una muchedumbre canalla e imbécil. Todos nos hemos hundido y nivelado en la mediocridad (...) La humanidad siente pasión por el embrutecimiento moral. Y eso me revienta porque formo parte de ella», escribe, y luego, una semana después: "Experimento contra la estupidez de mi tiempo olas de odio que me asfixian". Según Álvarez de la Rosa, aquí se podía apreciar el odio de Flaubert a un mundo que para él estaba cargado de estupidez, mediocridad e hipocresía.
En 1851, Gustave Flaubert comienza a construir su obra cumbre, Madame Bovary y a partir de entonces podemos conocer la correspondencia con su amigo Louis Bouilhet y Louise Colet como una guía diaria de como se fue gestando esta novela. Cada noche, cuando dejaba el trabajo de Bovary, Flaubert le escribía contando cada paso que daba, y las enormes dificultades en la búsqueda de la escritura perfecta.
"Anteayer me acosté a las 5 de la mañana, ayer a las 3. Desde el lunes pasado, he dejado de lado cualquier otra cosa y solo me he afanado en mi Bovary, cansado de no avanzar. (…) desde que nos dejamos, he escrito ocho páginas de la 2º parte: la descripción topográfica de un pueblo. Ahora voy a empezar una larga escena en la posada que me preocupa mucho (…) La Bovary camina a paso de tortuga y, por momentos, me siento desesperado. En un libro como este una desviación en una línea puede apartarme por completo del objetivo y estropearlo todo (…) Pierdo un tiempo incalculable al escribir, a veces, páginas enteras que después suprimo por completo, porque perjudica el movimiento".
El juicio de la sociedad contra Gustave Flaubert
Como Madame Bovary se publica por entregas en Revue de París, en octubre de 1856, la justicia toma medidas contra el escritor y lo acusan de violar las buenas costumbres y al culto católico. A pesar de ello, Flaubert fue absuelto gracias a la magistral defensa de su abogado Jules Senard. Por el contrario la polémica desatada por la acusación hizo que Madame Bovary creciera entre las preferencias y su éxito fue brutal. En una carta a su hermano, dice: "me voy a convertir en el personaje de la semana, todas las grandes zorras se disputarán la Bovary en busca de obscenidades inexistentes".
Ese año conoce también a la escritora George Sand y al escritor ruso Ivan Turgeniev con quien también logra construir una relación intelectual que se traduce en correspondencia personal.
TE RECOMIENDO LECTOR: Así describe Maupassant la meticulosidad obsesiva de su "padre" Gustave Flaubert
Pero también podemos encontrar un importante registro de reflexiones sobre la educación y su juicio crudo a la sociedad en las cartas dirigidas a la escritora George San. "(la enseñanza)acabará con el pueblo llano"; también desprecia a la prensa, "una escuela de embrutecimiento porque exime de pensar». Su individualismo le lleva a rechazar a «la masa, el número, que siempre es idiota", "hace falta una aristocracia natural, legítima"; niega una y otra vez el sufragio universal y exige «acabar con esa vergüenza de la inteligencia humana". Pero también se desgañita contra la estupidez humana.
A Ivan Turgeniev le cuenta también sobre la soledad, la melancolía y su capacidad de rumiar constantemente contra la "hidra de la estupidez humana". Antes de morir también se refiere al escritor Guy de Maupassant, su querido discípulo, diciendo: "La tierra tiene límites pero la estupidez humana es infinita".
Como ves, querido lector, las cartas de Flaubert pueden ser una excelente oportunidad para conocer mejor el pensamiento del escritor francés y el proceso que lo llevó a escribir sus obras más valiosas. Por eso, deben ser tomadas como tal, como las ideas de un artista, mas no como regla general para entender la vida.
¿Crees que es un buen título para este 2024?
AVISO LEGAL: Los cuentos, poemas, fragmentos de novelas, ensayos y todo contenido literario que aparece en mardefondo podrían estar protegidos por los derechos de autor (copyright). Si por alguna razón los propietarios no están conformes con el uso de ellos por favor escribirnos y nos encargaremos de borrarlo inmediatamente.
Me gusta Mar de Fondo porque instruye y no hace recordar a personas como yo que tenemos más años de los quisiéramos lo que en algún momento denuestra vida leimos
ResponderEliminarMe alegra aportar a ello :D
EliminarGracias por tan buenas lecturas ☺️🤗✨✨
ResponderEliminarGracias por los comentarios positivos 🤗✨
Eliminar