Muchas de las mejores novelas que se han escrito a lo largo de la historia de la literatura tienen que ver con el crimen perfecto. Esto supone largas horas de trabajo frente a la máquina o computadora, pues lo que se busca es captar la atención del lector o cumplir sus expectativas. Pero ¿qué sucede cuando la realidad supera a la ficción? Por eso, hoy te presento a cinco narradores asesinos que intentaron camuflar toda evidencia en las letras.
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La historia de la literatura no está exenta de los crímenes que superan la ficción en los libros. De hecho, se dice que todo narrador del género de "suspenso o crimen", tendría que sentir una afinidad por los asesinos, pero ¿qué pasa si quien escribe sobre homicidas también lo es?
¿Escritores asesinos?
A continuación te contaré sobre cinco escritores asesinos, algunos más conocidos que otros, pero todos con historias fuera de lo común.
Richard Klinkhamer
Klinkhamer asesinó a su pareja y plasmó sus emociones sobre un trozo de papel. El escritor y asesino holandés acabó con la vida de su esposa, evadió la justicia y más adelante escribió un libro sobre cómo llevar a cabo un crimen con estas características. Este fatídico hecho sucedió en 1991 y lo convirtió en el primer sospechoso ante la desaparición su pareja.
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A pesar de ser detenido, no se le imputaron cargos. Más tarde propuso a su editorial la idea de publicar un libro donde se narra las diversas maneras en que podría asesinar a su esposa, esta iniciativa fue rechazada. Luego puso en alquiler la casa donde vivía y fueron los nuevos inquilinos quienes dieron con el terrible hallazgo tras realizar algunas excavaciones en el jardín. Cuando llamaron a los forenses se descubrió que el cadáver pertenecía la esposa del escritor.
Liu Yongbiao
El escritor chino escribió las pistas de sus crímenes en su obra.
El autor nacido en Shanghai había asesinado a cuatro personas, tres de ellas eran miembros de su familia, pero no fue sino hasta 23 años después que las autoridades pudieron resolver el caso.
Los años pasaban y Liu crecía como un prometedor escritor, muchos de sus libros, como "The Guilty Secret", son como una confesión de lo ocurrido en 1995. Las pistas que se encontraron en su obra eran frases que podrían ser tachadas de preocupantes por lo medios chinos. Además, el autor confesó en una entrevista para la Televisión Central de China que algunas de sus historias se inspiraron en pensamientos propios sobre el homicidio.
El crimen que se llevó a cabo en un hostal, llevó a la policía a analizar una 60 mil huellas dactilares y entrevistar a todos los huéspedes. Tras dos décadas de impunidad y al encontrar las pruebas que inculpaban a Liu, este fue sentenciado a muerte en el 2018.
Anne Perry
La literatura de Perry se mezcla entre el género detectivesco y el misterio, estas dos características definen bien la producción de la escritora. Pero su vida también está manchada de sangre, pues a los 15 años participó del asesinato de la madre de una de sus mejores amigas. Esto ocurrió el 22 de junio de 1954 cuando conoció a Pauline Parker.
Envueltas en un velo de fantasía, ambas jóvenes planearon fugarse a Estados Unidos para que nadie pudiese separarlas; uno de los principales obstáculos era la madre de Pauline, por lo que decidieron acabar con su vida de la manera más brutal, golpeándola 45 veces en la cabeza con un ladrillo envuelto en una media.
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Tras ser halladas culpables ambas recibieron cinco años de cárcel y salieron bajo promesa de no volver a verse.
En la actualidad Perry tuvo que rehacer su vida y se cambió de nombre, fuera de todo lo ocurrido llegó a convertirse en una escritora abanderada de la novela negra, líder en ventas.
Sus libros también hablan sobre el pecado, el arrepentimiento y la búsqueda constante de la redención. A sus 83 años continúa en plena actividad literaria.
Kristian Bala
El novelista Kristian Bala creyó haber cometido el crimen perfecto, pero cometió un error de vanidad: narrarlo en un libro.
La policía no podría encontrar al culpable del cuerpo sin vida de Dariuz Janiszewski, a quien encontraron flotando sin vida en la ciudad polaca de Wroclaw, con las muñecas atadas a la espalda y signos de ahogamiento. Pero, más adelante notaron que había una referencia a estos hechos en la novela "Amok", escrita por Bala.
En este libro se detalla un asesinato con las mismas características del caso Janiszewski. Cuando los oficiales recibieron un ejemplar, el escritor pasó a ser el principal sospechoso. Años más tarde las autoridades rastrearon una de las últimas llamadas que recibió Janiszewski y encontraron que provenían del teléfono que Bala subastó por internet días antes de los hechos.
En 2008 el escritor fue declarado culpable y condenado a 25 años de prisión por asesinato, aunque él siempre se juró inocente y en su defensa dijo que la novela fue inspirada por reportes periodísticos que hablaban del caso. Aquí todavía hay beneficio de duda.
Óscar Castro Cedeño
Este es un caso muy particular. El escritor Castro Cedeño tenía dos vidas, por la mañana era una persona amable, seductor, con una ejemplar vida cultural que combinaba entre la fotografía y la poesía; mientras que por las noches, era un depredador en serie.
En 2012 se anunció el arresto del artista ecuatoriano, quien había llegado a Barcelona en 2007. Las investigaciones se iniciaron tras la muerte de Crispin Scott, un joven norteamericano de 20 años. Las autoridades de Barcelona allanaron la vivienda del poeta tras intensas pesquisas y encontraron allí fotografías de jóvenes desnudos y presuntamente violados.
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El móvil de los crímenes consistía en llevarlos a su apartamento y drogarlos para luego ultrajarlos sexualmente. Las fotografías tomadas por el poeta, respondían a un patrón que se repetía en toda la serie (víctimas vestidas y luego desnudas). Con todas esa pruebas el escritor fue sentenciado a 16 años de prisión.
Estos fueron algunos de los casos más polémicos de escritores que cruzaron el umbral de la ficción para dar vida a las historias más impactantes. La tentación de jugar con lo misterioso y plasmarlo en sus libros terminó por delatarlos y se convirtieron en ejemplos negativos para el arte ¿te animas a buscar sus rostros en internet?