Leamos "El síncope blanco", cuento de Horacio Quiroga

¡Hola, lectores! Fiódor Dostoyevski es una de las figuras más emblemáticas de la literatura rusa y universal, por lo que su vida se convierte en una referencia de lo humano que puede llegar a ser un artista. Dostoyevski fue uno de los escritores más determinantes del siglo XIX y sus debilidades hicieron el autor que conocemos ¡Leamos! 

Imagen tomada de X. 

¿Por qué Fiódor Dostoyevski?

Dostyevski destaca junto a importantes figuras como León Tolstói y Antón Chéjov, y como ellos también tenía debilidades que lo acompañaron toda la vida, como el juego y el alcohol, vicios que se combinaban con una recurrente epilepsia y muchas calamidades que tuvo que enfrentar. Todo influyó en el devenir de su obra. 

Algo que caracteriza al escritor de Crimen y Castigo es enfatizar en los valores espirituales de sus personajes y transparentar la realidad de su época. Dostoyevski nace el 11 de noviembre de 1821 en Moscú, su nombre completo fue Fiódor Mijáilovich Dostoyevski y su obra ha traspasado la barrera del tiempo.

Dostoyevski ha sido citado por muchos de los personajes más importantes de la historia como Albert Einstein o Virginia Woolf. De hecho, Einstein había resaltado la trascendencia humana y psicológica de la obra del escritor ruso diciendo "Dostoyevski me da más que ningún científico". 

Pero como dije al inicio, la vida del narrador ruso estuvo llena de hechos trágicos que forjaron el artista que fue. 

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En familia: la infancia de Fiódos Dostoyevski

En un artículo hablé con más detalle acerca del difícil trato que recibió Fiódor Dostoyevski de su padre. Su progenitor era médico, pero tenía un carácter agresivo hacía él, propio de una persona violenta. Por el contrario, la madre del escritor, era una mujer noble y amante de la cultura, en ella, el pequeño Fiódor encontraba refugio cuando su padre vivía episodios de ira. 

Al cumplir los once años, el joven Fiódor se mudó a Darovoye, en la Rusia central, allí su padre había comprado unas tierras con todos los ahorros que poseía. Cinco años más tarde se asomaría la primera tragedia para el escritor, pues en 1837, su madre murió de tuberculosis, y su padre, no pudiendo superar esta pérdida se sumió en el alcohol hasta el final de sus días. 

Un año después de la pérdida de su madre, tanto Fiódor como su hermano Míjail (quienes habían construido un lazo muy estrecho) se mudaron a San Petersburgo para estudiar en la Escuela de Ingenieros Militares. De de los dos hermanos Mijaíl no pudo superar las pruebas por problemas físicos y solo Fiódor pudo continuar adelante y terminó los estudios con el grado de subteniente a los veintidós años. 

Una nueva etapa

En 1839 muere el padre de Fiódor y existen dos historias sobre su muerte. La primera cuenta que éste había muerto a manos de los criados de su hacienda, quiénes estaban hartos de sus malos tratos, y lo obligaron a beber vodka hasta matarlo. Otra versión dice que la primera historia es falsa y que es un invento de un terrateniente rival quien quería apoderarse de sus tierras a un precio más bajo. 

A pesar de la difícil relación con su padre, esta muerte ocasionó remordimientos al futuro escritor, pues en algunas ocasiones le había deseado la muerte. Según Sigmund Freud en su artículo llamado "Dostoyevski y el parricidio" (1928) estos remordimientos pudieron desencadenar los ataques de epilepsia que desde entonces lo acompañaron el resto de su vida. 

El caso es que los remordimientos por esta muerte perseguirían para siempre al futuro escritor, que en numerosas ocasiones no había podido evitar desear la muerte de su progenitor. A este problema se sumarían sus graves episodios con el juego, una ludopatía que le acabaría provocando enormes deudas, y también una creciente dependencia del alcohol.

Comienzan los problemas

Un escritor con el talento de Fiódor comenzaba a verse enfermo y endeudado, con el fin de pagar sus deudas, decidió traducir la obra de Balzac "Eugenia Grandet". Lo que haría que tome una determinación: emprender la carrera de escritor. Para ello solicitó una excedencia del ejército, y en 1945 dejó definitivamente el mundo castrense y se dedicó en cuerpo y alma a la literatura. El resultado fue su primer libro, la novela epistolar Pobres gentes, de la cual Franz Kafka tiene una anécdota fascinante aquí. 

La obra fue un éxito, la crítica le reconocía el talento y en poco recibió los mejores halagos de Visarón Belinski, un prestigioso crítico literario ruso.  A pesar de ese comienzo arrollador, Dostoyevski no dejaría los malos hábitos y volvería a endeudarse y sufrir ataques de epilepsia cada vez más frecuentes. 

Sin embargo, continuó escribiendo, pero sus siguientes novelas El doble (1846), Noches blancas (1848) y Niétochka Nezvánova (1849), no obtendrían el mismo éxito de crítica, lo que sumió a Dostoievski en un profundo estado depresivo.

Los intelectuales liberales

Con un peso más a cuestas, el escritor empezó a frecuentar a un grupo clandestino de intelectuales liberales. Estos tenían problemas ya que el régimen zarista los tenía en la mira. Estamos hablando del famoso Círculo Petrashevski, liderado por el político y jurista Mijaíl Petrashevski. 

Estas migas hicieron que fuera arrestado por las fuerzas zaristas bajo la acusación de conspirar contra el zar Nicolás I, Fiódor fue condenado a muerte, aunque en el último momento le cambiaron la pena por la de trabajos forzados durante cuatro años en Siberia. Que no era un premio. 

Los días en prisión casi doblegan el espíritu del escritor ruso, las duras condiciones de su encierro la podemos conocer en esta memorable carta que escribe a su hermano Mijáil, donde cuenta las miserias del encarcelamiento. 

Dostoyevski y la Biblia

En esa etapa Dostoyevski decide acercarse a Dios, sumido en esas penosas condiciones dedicó su tiempo a leer la Biblia, un libro, que para el fue (según sus propias palabras) iluminador, pues conoció el valor del sufrimiento. Cuando cumplió su condena y pudo beneficiarse de la amnistía ofrecida por el zar Nicolás I. Dostoyevski fue enviado a Mongolia como soldado. 

En 1859 pudo licenciarse y por fin volver a Rusia junto a su esposa María Dimitrievna Isaieva, una viuda con la que se había casado en 1857. Su terrible experiencia en la cárcel de Siberia está plasmada en la obra Recuerdos de la casa de los muertos, publicada en capítulos entre 1861 y 1862.

Su adicción por el juego

Para colmo de males, la esposa de Dostoyevski muere y también su hermano Míjail en 1864, a todo eso se suma los incontrolables ataques de epilepsia. Agobiado por esta crisis, Dostoyevski decide viajar por Europa junto a Polina Súsloba, una joven escritora a la que había conocido en la revista El tiempo, fundada junto a su hermano y de la cual quedó perdidamente enamorado. 

Se trataba de una joven inteligente, dieciséis años más joven que el escritor ruso, junto a ella recorrió el Viejo Continente acumulando inspiración para escribir su obra "Notas de invierno sobre impresiones de verano" (1863). 

Lo cierto es que no pasó mucho para que la joven lo abandonase por un estudiante español.

La historia de Fiódor Dostoyevski no termina aquí. Él seguía enganchado al vicio y durante su viaje europeo llegó a Wiesvaden, donde se maravilló del casino de la ciudad.

Se dice que en sus salas se entregó al juego de la ruleta y llegó a ganar la asombrosa suma de diez mil francos, lo que hizo que se prendiera más de un vicio que lo llevaba al abismo. De todas esas experiencias pudo escribir una de sus más laureadas novelas, "El jugador" (1866). 

Crimen y Castigo

De vuelta a San Petersburgo, Fiódor Dostoyevski comenzó a escribir una de sus obras más aclamadas, Crimen y Castigo. Como era costumbre en la época, la obra se publicó por partes en la revista El mensajero Ruso. Sin embargo, las deudas, asfixiaban cada vez más al escritor por lo que en 1866 las crisis lo obligó a firmar un contrato con el editor Fyodor Stellovski en el que se establecía que los 3.000 rublos que recibiría Dostoievski como pago deberían pasar directamente a manos de sus acreedores.

De esta se desprende una historia muy inspiradora que cuento aquí bajo el título: Un libro en 26 días: la trágica historia detrás del don y la maldición de Dostoyevski. 

¿Cuál era el problema? Es que el contrato también estipulaba que la revista se quedaría con los derechos de edición de todas sus obras y se establecía el compromiso por parte del autor de entregar una novela nueva aquel mismo año. Esto era el equivalente a vender su alma a la revista. 

Si Fiódor no cumplía con el plazo, debería pagar una multa y de no entregarla hasta diciembre, éste perdería todos los derechos patrimoniales de sus obras. La historia completa de esta carrera contra el reloj la dejó aquí. 

La culpa

Si hablamos de la obra de Dostoyevski tenemos que referirnos siempre a clima de culpa, moral, búsqueda de justicia; como lo que encontramos en Crimen y Castigo, desde la historia protagonizada por Rodión Románovich Raskólnikov, un estudiante de veintitrés años miembro de una humilde familia del interior de la Rusia imperial quien, tras asesinar a una vieja usurera y a su hermanastra, es condenado a ocho años de prisión en Siberia. 

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Víctima del remordimiento y la culpa, al final Románovich será redimido por el amor de su novia, Sonia. La novela catapultaría a Dostoyevski al éxito mundial. 

Luego de este repunte tendría otras buenas obras como El idiota (1868), donde el autor afirma: 

"El hombre puede vivir sin ciencia, puede vivir sin pan, pero sin belleza no podría seguir viviendo, porque no habría nada más que hacer en el mundo. Todo el secreto está aquí, toda la historia está aquí.

 

Y posteriormente apareció Los hermanos Karamázov (1880), para muchos críticos su obra cumbre.

Muerte de Fiódor Dostoyevski

Felizmente Dostoyevski pudo conocer y vivir del amor, pues al final contrajo matrimonio con su antigua mecanógrafa, Anna Grigórievna, con la que tuvo cuatro hijos. A ella dedicó esta sentida carta por todos los errores que cometía a causa del vicio del juego. 

La muerte de Dostoyevski se dio en San Petersburgo el 9 de febrero de 1881, de una hemorragia pulmonar asociada a un enfisema y a un ataque epiléptico. En la actualidad se encuentra enterrado en el cementerio Tijvin, en el monasterio de Alejandro Nevski, en San Petersburgo.

Como ven, queridos lectores, en muchos escritores siempre la primera obra es la más destacada, la cumbre, y luego les es difícil superar o emular el éxito del libro novel, pero el caso de un genio como Dostoyevski fue todo lo contrario, fue de más a menos y de menos a más hasta alcanzar la inmortalidad. 

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